Oh là là, le cinéma
“¿Y hoy aquí que ‘echan’?” “¡Es el Festival de Cine Francés!”. Son las siete y media de la tarde en la céntrica calle Alcazabilla. Una calle muy transitada no solo por los turistas que deciden visitar nuestra ciudad fuera de los meses de verano, sino también por los propios malagueños. Las inmediaciones del cine Albéniz son un hervidero de personas con diferentes acentos. En su mayoría francés. Pero todos con la misma intención, disfrutar del cine galo durante siete intensos días.
A medida que el reloj avanza el número de personas que se encuentran en los alrededores es aún mayor. Algunos despistados de última hora llegan con prisas para recoger sus entradas cuando quedan escasamente quince minutos para que comience la 23ª edición del Festival de Cine Francés, que además este año se presenta con un toque más que especial, ya que conmemora el 50 aniversario de la llegada de la Alianza Francesa a Málaga, organizadora del festival, siendo este, como bien afirma Nathalie Hadj, Cónsul Honoraria de Francia en la ciudad “una de las mayores actividades culturales que organiza la Alianza”. De igual modo Hadj resalta que “Málaga es una ciudad muy ligada a Francia y este festival es una apertura para el cine que se hace fuera. Además está bien que se vea lo que se hace en el país vecino porque la cultura francesa y la española son muy complementarias”.
Olvídense de Cannes. De alfombras rojas, de modelos de Channel y bolsos de Louis Vuitton. Cualquier parecido con la realidad propia del glamour cinematográfico es pura coincidencia, a no ser que te cruces con algún evento particular. En definitiva, el ambiente que se respira es el propio de una quedada informal en cualquier cine de la ciudad pero con más acento “franchute” de la cuenta.
Gente mayor y gente joven. Parejas. Familias enteras y grupos de amigos esperan la comedia Rock’ n Roll protagonizada por Guillaume Canet y Marion Cotillard que dará el pistoletazo de salida a esta edición del festival, el cual, a diferencia de años anteriores, destacará por su plano cómico. La comedia, dirigida por el propio Canet, cuenta la historia de un actor de 43 años, que vive una vida alegre y lo tiene todo para ser feliz. Pero todo esto cambia cuando su joven compañera de reparto le dice que él ya no es “rock’ n roll” y que no se encuentra en su top de actores deseables, por lo que decide hacer un giro de 180 grados en su vida.
Algunos atolondrados, con gestos de disculpa y rostros apretados que denotan llegar tarde, ocupan las pocas butacas que aún quedan disponibles. Aunque con cierto retraso a la hora prevista, las luces se apagan. Suena el metraje. El cine aplaude y se silencia al mismo tiempo, dando comienzo a la proyección del primer filme. Arranca la vigésima
tercera edición del Festival de Cine Francés.